Trump y el secretario de Defensa critican al Ejército y anuncian retorno a estándares tradicionales
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y su secretario de Defensa, Pete Hegseth, han protagonizado una jornada marcada por duros señalamientos hacia la cúpula militar estadounidense y el anuncio de reformas orientadas a restaurar lo que consideran estándares tradicionales en las Fuerzas Armadas.
Críticas a la dirección actual del Ejército
Durante su partida hacia la Universidad del Cuerpo de Marines en Virginia, donde estaba prevista una reunión con líderes militares, Trump declaró que procederá al despido inmediato de cualquier alto mando militar que no cuente con su aprobación. Esta postura contrasta con comentarios realizados días antes, cuando el presidente había manifestado que aprovecharía el encuentro para expresar su apoyo a los altos mandos.
Rechazo a iniciativas de diversidad y defensa de la disciplina tradicional
En el evento, Pete Hegseth, secretario de Defensa, criticó abiertamente las políticas de diversidad implementadas en las últimas décadas, responsabilizándolas de una supuesta decadencia institucional. Hegseth aseguró que quienes no compartan su visión deberían renunciar a sus cargos. “Líderes políticos insensatos e imprudentes marcaron el rumbo equivocado y perdimos nuestro camino. Nos convertimos en el Departamento Woke”, afirmó durante su intervención. “Pero eso se acabó”, sentenció.
Hegseth también justificó la destitución de oficiales de alto rango, mencionando expresamente al general afroamericano de mayor rango y a la principal almirante, de género femenino, a quienes vinculó con una “cultura desestructurada” dentro del Ejército.
Reformas en la gestión y estándares físicos
El secretario de Defensa anunció modificaciones profundas en los procedimientos para la gestión de quejas por discriminación y en la investigación de presuntas irregularidades dentro del Pentágono. Según Hegseth, el actual sistema ha generado un ambiente de inseguridad entre los líderes militares.
Dirigiéndose a una audiencia compuesta por los principales generales y almirantes estadounidenses, Hegseth subrayó la necesidad de restaurar la disciplina y la exigencia física tradicional. Criticó abiertamente la presencia de altos mandos con sobrepeso, calificando la situación como “completamente inaceptable”.
- Las pruebas de aptitud física se regirán exclusivamente por parámetros masculinos.
- Se reforzarán las normas de aseo personal y presentación, prohibiendo, entre otros aspectos, el uso de barbas.
Hegseth concluyó su intervención instando a los oficiales que no compartan estos valores a abandonar voluntariamente sus cargos, mientras que aseguró que la mayoría de los presentes respaldan el nuevo rumbo propuesto.
Perspectivas y reacciones
Estas declaraciones y medidas suponen un giro significativo respecto a las políticas de diversidad y equidad que habían sido impulsadas en años recientes dentro de las Fuerzas Armadas de Estados Unidos. El anuncio ha generado expectación tanto en el ámbito militar como en la opinión pública, ante la posible reconfiguración de los estándares y valores en uno de los principales ejércitos del mundo.
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