La UCO sospecha la existencia de más empresas similares a Servinabar en el amaño de obras públicas
La Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil ha identificado un entramado que obligaba a grandes constructoras a asociarse con empresas denominadas “socios locales”, como Servinabar, para participar en licitaciones de obras públicas. Las investigaciones apuntan a que este esquema no se limitaba a una sola compañía y que podrían existir otras entidades operando bajo la misma modalidad en diferentes regiones de España.
Esquema de asociaciones forzadas en licitaciones públicas
Según los informes de la UCO, el sistema fue diseñado por el entorno de Antxon Alonso, socio de Santos Cerdán en Servinabar, y consistía en exigir a grandes firmas constructoras, como Acciona, la necesidad de aliarse con un “socio local” para poder acceder a los contratos de obra pública. Esta imposición se evidenció en varias comunicaciones interceptadas por los investigadores, donde se menciona expresamente la obligatoriedad de contar con una empresa local como condición para participar en los proyectos.
En una conversación fechada el 22 de enero de 2021, Antxon Alonso recordó a Justo Vicente Pelegrini, alto directivo de Acciona en aquel entonces, la importancia de no olvidar la figura del “socio local”. Servinabar, la empresa vinculada a Alonso y Cerdán, formaba parte de una unión temporal de empresas (UTE) junto a grandes constructoras, lo que facilitaba su presencia en licitaciones sospechosas de estar amañadas.
El alcance del término “socio local”
La UCO destaca la relevancia del concepto “socio local”, ya que su utilización recurrente en mensajes internos de la trama hace sospechar que el modelo podría haberse replicado con otras sociedades similares a Servinabar en distintos puntos del país. Por ejemplo, el 3 de abril de 2020, José Alberto Royo Carazo, también vinculado a Acciona Construcción, informó a Antxon Alonso sobre la exigencia de la participación de un socio local en determinado proyecto, reforzando la hipótesis de que esta práctica era una condición sistemática y no un caso aislado.
- Grandes constructoras debían asociarse con empresas locales para acceder a contratos públicos.
- El término “socio local” aparece de manera reiterada en las comunicaciones de la trama.
- La UCO investiga posibles redes similares a la de Servinabar en otras regiones españolas.
Vínculos políticos y capacidad de influencia
La investigación de la UCO subraya también la influencia que ejercía Antxon Alonso gracias a su relación con Santos Cerdán, una figura con relevancia dentro del partido gubernamental y con acceso al Ejecutivo. Los informes policiales resaltan la frecuencia y cercanía de las interacciones entre Alonso y Cerdán, detallando encuentros personales mantenidos en la sede del PSOE en la calle Ferraz de Madrid. Estas reuniones, registradas en mensajes a través de aplicaciones de mensajería, evidencian la conexión directa entre los responsables empresariales y figuras políticas de alto nivel.
En concreto, la UCO recoge dos encuentros documentados en 2021: uno el 2 de junio, cuando Alonso comunicó a Cerdán su llegada a Ferraz, y otro el 15 de noviembre, cuando ambos quedaron para tomar café frente a la sede socialista, lo que refuerza la sospecha sobre la existencia de una red de influencias y posibles acuerdos para manipular la adjudicación de obras públicas.
Conclusión
La UCO mantiene abiertas las pesquisas ante la posibilidad de que el modelo detectado con Servinabar y sus “socios locales” se haya extendido a otras empresas y territorios, lo que podría suponer una red más amplia de amaños en contratos públicos. El caso pone en relieve la necesidad de extremar los controles en las licitaciones y vigilar estrechamente las asociaciones empresariales en el sector de la obra pública.
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