Estados Unidos impone nuevas sanciones a familiares y allegados de Nicolás Maduro
El Gobierno de Estados Unidos anunció este viernes la imposición de nuevas sanciones dirigidas a familiares y allegados cercanos del presidente venezolano, Nicolás Maduro, así como de su esposa, Cilia Flores. Esta medida incrementa la presión internacional sobre el mandatario venezolano, en el marco de una campaña sostenida por la administración de Donald Trump para forzar su salida del poder.
Acusaciones de apoyo al «narcoestado rebelde»
El Departamento del Tesoro estadounidense detalló en un comunicado que siete personas vinculadas a Nicolás Maduro y Cilia Flores han sido sancionadas. El secretario del Tesoro, Scott Bessent, acusó a los sancionados de «apoyar el narcoestado rebelde de Nicolás Maduro». Bessent declaró: «No permitiremos que Venezuela siga inundando nuestra nación con drogas mortales. Maduro y sus cómplices amenazan la paz y la estabilidad de nuestro hemisferio. La administración Trump seguirá atacando a las redes que sustentan su dictadura ilegítima».
Respuesta de Venezuela y contexto internacional
Hasta el momento, el Ministerio de Información de Venezuela no ha emitido comentarios sobre las nuevas sanciones. En ocasiones anteriores, Maduro y su gobierno han negado cualquier vínculo con actividades delictivas, asegurando que Estados Unidos busca un cambio de administración para apropiarse de las vastas reservas petroleras del país sudamericano.
Las sanciones llegan en un momento de creciente tensión. La administración Trump ha intensificado su presión sobre Maduro, promoviendo activamente su salida del poder y desplegando fuerzas militares en el sur del Caribe. Asimismo, Washington ha realizado operaciones en la región contra embarcaciones supuestamente cargadas de drogas, confiscado petroleros sancionados y declarado un «bloqueo» para todos los buques sancionados que entren o salgan de Venezuela, miembro de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP).
Detalles de las nuevas sanciones
La acción de este viernes afecta especialmente a familiares de Carlos Erik Malpica Flores, sobrino de Cilia Flores y previamente sancionado por el Gobierno estadounidense por presunta implicación en casos de corrupción en la petrolera estatal venezolana. Los sancionados incluyen a la madre, el padre, la hermana, la esposa y la hija de Malpica Flores. Esta medida busca aislar aún más a la cúpula cercana a Maduro y a sus colaboradores más estrechos.
Protección temporal para Citgo Petroleum
En paralelo a las sanciones, el Departamento del Tesoro de Estados Unidos anunció la extensión de una licencia general que protege temporalmente a Citgo Petroleum, filial estadounidense de la petrolera estatal venezolana, de las reclamaciones de sus acreedores hasta el 3 de febrero. Esta prórroga, que reemplaza a una anterior de seis meses, busca evitar la pérdida de activos estratégicos venezolanos en medio de las disputas judiciales y financieras que enfrenta el país.
Citgo, con sede en Houston, ha estado bajo protección de Washington durante los últimos años, especialmente ante la subasta judicial de acciones de su matriz, PDV Holding. La actual licencia impide transacciones con un bono venezolano respaldado por acciones de Citgo, una medida que mitiga el riesgo de que la empresa cambie de manos en medio de la crisis.
Venta de acciones de la matriz de Citgo
En noviembre pasado, un juez estadounidense autorizó la venta de acciones de PDV Holding a una filial de Elliott Investment Management, tras una oferta de 5.900 millones de dólares presentada en una subasta judicial. Esta venta, aún pendiente de la aprobación final del Departamento del Tesoro, representa un paso clave en el proceso de pago a hasta 15 acreedores relacionados con impagos de deuda y expropiaciones por parte del gobierno venezolano.
- Las sanciones buscan aislar económicamente a la administración de Maduro.
- Estados Unidos mantiene la presión militar y financiera sobre el gobierno venezolano.
- La protección temporal a Citgo responde al interés de evitar la pérdida de activos estratégicos.
Con estas nuevas medidas, la administración Trump refuerza su estrategia de presión máxima contra el gobierno venezolano, en un contexto de crisis política, social y económica que continúa afectando a Venezuela y su posición en la región.
Nota:
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