Continúan los problemas en el recuento electoral en Honduras mientras Nasralla lidera sobre el candidato respaldado por Trump
El proceso de escrutinio de las elecciones presidenciales en Honduras ha vuelto a interrumpirse por segunda vez en menos de 48 horas, intensificando la tensión política y social en el país centroamericano. A cuatro días de la jornada electoral, los resultados provisionales muestran una contienda muy reñida marcada por demoras, acusaciones de fraude y la creciente incertidumbre sobre el desenlace.
Ventaja mínima de Salvador Nasralla
Salvador Nasralla, representante del centrista Partido Liberal y conocido presentador de televisión de 72 años, mantiene una ventaja marginal en el recuento de votos. Según datos oficiales divulgados con el 78% de las actas transmitidas, Nasralla obtiene el 40,27% de los sufragios, superando por aproximadamente 15.000 votos a Nasry Asfura, candidato del conservador Partido Nacional.
Asfura, exalcalde de Tegucigalpa, cuenta con el respaldo del presidente estadounidense Donald Trump y ha reunido el 39,64% de las preferencias. En tercer lugar se encuentra la exministra Rixi Moncada, representante de la izquierda oficialista, quien solo ha conseguido cerca del 19% de los votos, una cifra considerablemente inferior respecto a los dos principales aspirantes.
Reclamos y preocupación por las demoras
Las demoras y la falta de transparencia en el recuento han generado inquietud tanto entre la ciudadanía como en la comunidad internacional. Observadores de la Unión Europea y de la Organización de los Estados Americanos, junto a la autoridad electoral hondureña, han hecho un llamado a la calma y la paciencia hasta que concluya el proceso de conteo.
No obstante, el ambiente se ha visto enrarecido por la interrupción inesperada de la publicación de resultados. Cossette López-Osorio, consejera del Consejo Nacional Electoral (CNE), expresó públicamente su descontento por la falta de notificación al Pleno sobre las detenciones del sistema en momentos críticos, calificando la situación de “inexcusable”. Asimismo, cuestionó el desempeño de la empresa encargada del procesamiento y divulgación de actas, señalando incumplimientos contractuales y una falta de respeto hacia el pueblo hondureño.
Problemas técnicos y acusaciones de manipulación
El proceso de recuento rápido, diseñado para ofrecer resultados preliminares con celeridad, se ha visto afectado por fallos técnicos y dificultades en la plataforma web destinada a la actualización en tiempo real de los datos. Estos inconvenientes han generado sospechas y aumentado la frustración de los actores políticos y la sociedad civil.
El domingo y lunes tras las elecciones, los primeros resultados otorgaron a Asfura una ligera ventaja de apenas 500 votos. No obstante, ante la estrechez del margen y los problemas en el sistema, las autoridades electorales declararon un “empate técnico” y anunciaron que sería necesario proceder a un conteo manual de los sufragios.
Perspectivas e incertidumbre
La actualización más reciente del recuento ha dado la delantera a Nasralla, aunque la diferencia sigue siendo mínima y el proceso continúa bajo escrutinio nacional e internacional. La combinación de problemas técnicos, retrasos y denuncias de irregularidades plantea interrogantes sobre la gestión electoral y la legitimidad del resultado final.
- El Consejo Nacional Electoral y los observadores internacionales insisten en la necesidad de mantener la calma y esperar los resultados definitivos.
- La población hondureña permanece expectante ante un desenlace que podría marcar un giro político significativo en el país.
- La presión crece para que las autoridades garanticen transparencia y confianza en el proceso democrático.
El desarrollo de los acontecimientos en los próximos días será clave para la estabilidad política y la credibilidad institucional en Honduras.
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